Activision refuta las reclamaciones de la demanda de Uvalde contra Call of Duty
Activision Blizzard ha presentado una sólida defensa contra las demandas presentadas por las familias de las víctimas del tiroteo de Uvalde, rechazando las afirmaciones que vinculan Call of Duty con la tragedia de 2022. Las demandas de mayo de 2024 alegan que la exposición del tirador al contenido violento del juego contribuyó a la masacre de la escuela primaria Robb, que se cobró la vida de 19 niños y dos maestros.
Las demandas, que también apuntan a Meta por supuestamente facilitar el acceso del tirador a anuncios de armas de fuego en Instagram, sostienen que ambas empresas fomentaron un entorno que fomentaba el comportamiento violento en jóvenes vulnerables. El tirador, un ex alumno de Robb Elementary, jugaba Call of Duty con regularidad, incluido Modern Warfare, y usaba un rifle AR-15, similar al que se muestra en el juego.
La presentación de Activision de diciembre, que abarca 150 páginas, niega categóricamente cualquier vínculo causal entre Call of Duty y el tiroteo. La empresa invoca las leyes anti-SLAPP de California, diseñadas para proteger la libertad de expresión de litigios frívolos, y busca que se desestime el caso. Además, Activision afirma el estatus de protección de Call of Duty bajo la Primera Enmienda, argumentando que las acusaciones dirigidas a su "contenido hiperrealista" infringen este derecho fundamental.
El testimonio de un experto refuerza la defensa de Activision
En apoyo de su defensa, Activision presentó declaraciones de destacados expertos. La declaración de 35 páginas del profesor de Notre Dame, Matthew Thomas Payne, contextualiza Call of Duty dentro de la tradición establecida del entretenimiento de temática militar, refutando la afirmación de la demanda sobre el "campo de entrenamiento". Patrick Kelly, director creativo de Call of Duty, contribuyó con un documento de 38 páginas que detalla el desarrollo del juego, incluido el importante presupuesto de 700 millones de dólares para Call of Duty: Black Ops Cold War.
Las familias Uvalde tienen hasta finales de febrero para responder a la defensa integral de Activision. El resultado del caso sigue siendo incierto, pero pone de relieve el debate social en curso en torno a la posible influencia de los videojuegos violentos en la violencia en el mundo real, una discusión que se reaviva con frecuencia después de tiroteos masivos.